miércoles, 13 de enero de 2021

Escribir en tiempos de crisis

Cuando se menciona la palabra crisis, algunas personas reviven situaciones que los han llevado a sucumbir o a desesperanzarse;  no obstante, debemos afirmar que los tiempos de crisis son tiempos de oportunidades, y debemos reaccionar ante las adversidades con resiliencia. Un aspecto importante para lograr descubrir y aprovechar las oportunidades, es saber lo que se quiere o aquello que se pretende obtener realmente y con exactitud. Algo que parece tan sencillo es realmente más complejo. Es preciso que el objetivo esté claramente construido en la mente, visualizado con claridad y concreción, haciendo una recreación mental de la situación esperada con todos los elementos presentes; asimismo, teniendo bien asumido lo que se pretende obtener, el esfuerzo que se está dispuesto a realizar y lo que estamos dispuestos a perder, sacrificar o renunciar en este proceso.

Cuando todos los pasos se realizan correctamente favorece la consecución del objetivo; el hecho de que el individuo realmente tenga emociones positivas al pensar en la consecución del mismo y en cada logro parcial hacia el objetivo, va retroalimentando la motivación por conseguirlo mediante la vivencia de cargas emocionales positivas.  Si todo este  proceso no se realiza adecuadamente y está perfectamente bien asumido, las estrategias mentales no se van a diseñar correctamente a pesar de que sepamos construirlas.

Igualmente, es preciso poner a trabajar de forma adecuada el “simulador mental” donde a través de visualizaciones, fabricamos una proyección mental del futuro, de aquello que pensamos que va a suceder y que va a servirnos para buscar los recursos personales y elaborar los pasos a seguir, la manera de hacerlo, cómo prever posibles dificultades o contratiempos y estar preparado para afrontarlos si llega el momento. 

Es en este punto donde la escritura viene a jugar un papel terapéutico crucial, que permitirá exteriorizar nuestras emociones, desahogarnos, aclarar nuestros sentimientos o nuestras dudas, animarnos, conocernos mejor e incluso ayudarnos a tomar alguna decisión. El secreto de esta técnica apoyada en la escritura emocional radica en que nos permite darle un sentido a lo que estamos viviendo. Cuando escribimos, no solo logramos asimilar la experiencia, sino que también la despojamos de su huella negativa y logramos adoptar una perspectiva más objetiva y racional. Por tanto, escribir expresando nuestras emociones nos ayudará a desarrollar una actitud más resiliente.

La escritora Diana Morales propone algunas ideas de cómo podemos utilizar la escritura como una herramienta terapéutica. Entre ellas, menciona: “La carta para superar conflictos”; la cual consiste en sacar a la luz lo que sentimos, vivirlo plenamente, descubrir qué puede haber detrás  de un gran enfado con la otra persona e incluso perdonar. Todo este trabajo es personal. No se pretende que esta carta se lea a nadie, sino simplemente que nos sirva de ejercicio emocional. Después se puede guardar, romper o quemar. Esta carta la debemos escribir preferiblemente a mano, a esa persona con la que tengamos un conflicto. Pero, siguiendo un orden:

–Primero, le cuentas a esa persona por qué estás enfadado(a). Deja salir toda tu ira, si tienes que decir palabras soeces, hazlo. Cuanto más te sueltes, mejor.

–Segundo, haz lo mismo, pero ahora cuéntale qué es lo que te causa tristeza de esta situación, lo que te hace sentir mal o te ha hecho daño. Aquí ya no se trata de acusar, sino de mirar dentro de ti.

–Tercero, tendríamos el mismo proceso, pero ahora se trata de contarle los miedos que tienes. Qué es lo que te causa temor de esta situación.

–Cuarto, otro párrafo al menos, en este caso dedicado al arrepentimiento. Incluso en las mejores discusiones o conflictos podemos sentir que hemos  dicho algo que no debíamos; o al contrario, que quizá pudimos haber dicho o hecho algo de otra forma. Déjalo salir.

-Por último, los párrafos finales se destinarían al amor. Cuenta aquello que aprecias de la otra persona, lo que te hace o te ha hecho feliz. Aquello por lo que le estás agradecida(o). Esta carta puede ser muy poderosa y hacer aflorar sentimientos que no sabías que tenías dentro de ti, y eso siempre es de ayuda. El objetivo es aclarar y descubrir nuestras emociones, y liberarlas para intentar solucionar un conflicto, que puede ser personal o con otra persona.

Otro de los ejercicios de escritura que recomienda la escritora es la  “Lista de agradecimientos”. En éste debemos escribir una lista de, al menos, 30 cosas por las que estemos agradecidos. Se puede perfectamente, ya que podemos dar las gracias por muchísimas cosas. Desde porque nuestros padres nos dieran a luz, hasta por el día tan bonito que hace, o dar las gracias por la presencia de una persona en nuestras vidas que siempre está ahí para nosotros, o por la salud, o por la naturaleza, en fin, por muchísimas cosas. La idea de este ejercicio es centrarse en lo positivo que disfrutamos en nuestras vidas para disfrutarlo más. Una variante es escribir tres cosas por las que te sientes agradecido cada noche en una libreta.

De igual manera, con otra técnica, la escritora invita a “Escribir la vida que quieres”. En este ejercicio se trata de describir la vida que deseas en el futuro, con todo detalle y con todos sus éxitos. Se trata de describir tu vida ideal, tanto laboral, como amorosa, salud, familia, incluso la casa en la que vivirás, los éxitos que aspiras. Cuanto más concreto, mejor. Algunos creen  que es mejor escribirla en presente, como si ya la estuvieras viviendo, y sentirlo así. Y parte de la técnica es repetir la escritura de esta vida ideal muchas veces, para fijarla en la mente y atraerla hacia nosotros.

Estos ejercicios de escritura nos permitirán afrontar situaciones molestas, miedos, apegos y bloqueos, y especialmente, coadyuvarán en la visualización creativa, motivadora y positiva de nuestras vidas. La escritura es poderosa y puede ser utilizada como una herramienta terapéutica. Conocer y gestionar adecuadamente todos los procesos cerebrales de forma individual, así como manejar adecuadamente las relaciones en todos los ámbitos van a ser determinantes para identificar y aprovechar las oportunidades; y sobre todo, en tiempos de crisis donde es necesaria la clarividencia y perspectiva ante las situaciones, la escritura es de gran ayuda para poner en marcha cualquier proyecto de vida. Recordando siempre que el pasado no podemos cambiarlo, pero lo que es evidente es que hoy escribimos las líneas  de nuestro futuro.